El fútbol siempre ha sido parte importante de mi vida, es la actividad deportiva que más disfruto, con la que más me entretengo y la que más frecuentemente realizo.
Desde pequeño estuve en varios equipos de fútbol, impulsado por mi padre, que en su tiempo fue un gran jugador, y que se quedó a unos pasos de debutar profesionalmente, esto se debió a que mis abuelos le hicieron escoger entre el estudio y el deporte, pero como en esta vida nada es seguro, y así como el día de hoy puedes ser un crack del balompie, mañana puedes estar lesionado y alejado de las canchas el resto de tu vida, así optó por los estudios.
Les comentaba, desde niño estuve en varios equipos, cuando tenía unos 10 años, estuve en el primero, era demasiado grande para la división menor, y muy chico para la división mayor, aunque no me quedó de otra que jugar ahí.
En la foto de arriba me pueden ver cuando aún era joven e inocente (aún soy joven, pero ya no inocente, XD) a mi lado izquierdo se encuentra el que alguna vez fue mi mejor amigo, Ivan, que por diferentes motivos que no les contaré en este post, terminamos nuestra amistad; debajo de mi se encuentra Roberto, que también fue un gran amigo hasta que intentó bajarme a mi novia (Eso no se hace) y tampoco le hablo, y al lado de Roberto se encuentra mi hermano Edwin, a él si le hablo, XD.
Esa etapa de futbolista fue un fracaso, mi equipo era un perdedor, y nunca ganabamos nada, solo recuerdo un partido contra un club deportivo llamado "Raquet" o algo así, el mejor partido que jugué con ellos; siempre nos ganaban, esa era la premisa, ya todo el mundo lo sabía, pero en aquella ocasión que nos tocó jugar en su campo, empatamos a 4 goles, un gran partido, no recuerdo mucho de el.
Después pasó algo de tiempo hasta que volviera a estar en otro equipo, ya saben, el típico de la secundaria, con la "selección", que también estaba bien pedorra y solamente juntaban a los amigos del capitán, por eso perdíamos, eran bien maletas, XD.
Luego, durante mi etapa preparatoriana, jugué en un equipo de fútbol rápido, nunca ha sido lo mío, siempre me cansaba en exceso y la verdad es que a pesar de que teníamos buen nivel, el mal manejo del organizador del equipo nos terminó ahuyentando a todos.
Actualmente me invitaron un nuevo equipo, pero esto no se ha concretado debido a la cantidad excesiva de trabajo que tengo últimamente, así que está en veremos.
Pero, ¿Porque escribir sobre el fútbol? ¿Que tiene de bueno? Hace poco leía algo al respecto en un post del blog de Paiki (Cuyo enlace está en el costado derecho, aunque parece ser que ya lo está abandonando) él se pronunciaba en contra de este juego, decía que lo que le impulsaba a hacerlo era esa multitud iracunda en la que se puede transformar el groso del aficionado común, pero también aclaraba que en realidad, el problema no era del juego como tal, sino, de quien lo juega, y creo yo que tiene la razón, muchas veces nos enojamos y sobresaltamos por algo que no nos gusta en un partido, pero, ¡Hey! es solo un partido.
Por mi parte les puedo decir, que una de las actividades que más disfruto es acompañar a mi padre al estadio, los olores, los sabores, los colores, es llenarse de pasión, pasar el rato, matar el tiempo y divertirse, divertirse con la magia que algunos jugadores llevan en los botines.
Lamento mucho si no eres fanático de este deporte, y también te comprendo, no es algo que deba gustarle a todos, por eso existen otras variedades. Quise escribir esta entrada porque se acerca el mundial (Por si habían tenido la cabeza debajo de una piedra y no se habían dado cuenta), y creo que valía la pena mencionar algunas cosas por las que soy aficionado.
El mundial empieza el próximo viernes, y ahí estaré frente a mi televisor, esperando para ver jugar a la selección, y llenarme de esa pasión que se vive cada cuatro años.
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